Los cambios en la Cuarta Transformación se empiezan a notar poco a poco de diversos ámbitos, entre ellos está el relanzamiento de marca de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Las críticas en redes sociales por parte de grupos opositores como México Libertario no se hicieron esperar por la integración del color marrón al logotipo y el nuevo eslogan de la paraestatal.
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Es por esto que platicamos con Elsa Juana Mercado Centeno, CEO de Carácter, Marketing y COMS, quien nos comentó si esta decisión fue una buena estrategia de relanzamiento de marca.
Las modificaciones en la imagen de las instituciones gubernamentales son inminentes con la llegada de una nueva Administración, mas Pemex sobresale según Mercado: “El rebranding de los íconos nacionales, incluso el de la Ciudad de México y el de Pemex es muy representativo para el país, porque son logotipos e imágenes que han representando la soberanía durante muchos años”.
Mercado Centeno, quien también es académica en la Escuela de Comunicación de la Universidad Panamericana, interpretó este cambio de imagen: “El hecho de que estén cambiando el logotipo y que se lo estén apropiando con los colores de un partido en particular no es nada más un símbolo de que ya no es una paraestatal”.
“Con la reforma energética, se está abriendo al mercado y atrae inversión privada nacional e internacional”, contextualizó. “El hecho de tener este rebranding es como decir que Pemex no solo es independiente, sino que es del Gobierno y este equivale a Morena”.
¿Un caso de éxito para Pemex?
Las opiniones están polarizadas entre si este cambio beneficiará o no a la petrolera administrada por Octavio Romero.
El 29 de enero, la calificadora Fitch Ratings bajó las calificaciones crediticias de Pemex por la baja en inversiones y producción, además de su vínculo con el Gobierno.
“En términos de branding, si lo manejan bien, pudiera ser un caso exitoso para Morena, pero no necesariamente para México. Lo que Pemex necesita para revivir es inversión y una metodología de cuidado de la seguridad, de una reestructuración para convertirla en una empresa productiva. Eso no va a venir de Morena, eso tiene que venir de una visión como empresa”, explicó Mercado.
“Tiene que ser productiva, no tiene que ser una caja chica como lo fue en el pasado. Los ingresos importantes que tenía México eran de Pemex. Después se diversificó y ya no había una dependencia del Gobierno completa. Lo que sucede ahora es que están diciendo que Pemex se va a convertir de nuevo en caja chica”, añadió la experta.
Por el rescate de la soberanía
El nuevo eslogan de la paraestatal fue parte de las inconformidades de grupos de oposición en redes sociales debido a que lo compararon con el de la petrolera venezolana PDVSA, “Plena soberanía petrolera”.
“Lo que están diciendo (con el eslogan) es que ese recurso natural, el petróleo, es de los mexicanos, pero cuando lo mueven de ser una industria independiente a politizarla, nos genera la pregunta de qué va a hacer el partido que esté en el poder con esos recursos directamente”, cuestionó la mercadóloga.
“Si es una empresa completamente politizada y pensada para ser una caja chica no va a funcionar, sino como un instrumento del Gobierno para perpetuarse en el poder como lo que sucedió con PDVSA”, señaló Mercado Centeno sobre las consecuencias de un mal manejo de la estrategia de marketing.
“El petróleo es de los mexicanos, es lo que siempre dicen, pero ¿de todos los mexicanos? Es de tal partido, porque mucha gente no va a ver ese dinero”, continuó la CEO. “Es una bandera que usan para apropiarse de eso. Aunque físicamente y económicamente no sucede, es un símbolo del manejo de los íconos y en el inconsciente colectivo de las masas”.
Sergio Sánchez
