Wilmington.- El huracán Florence, a solo tres horas de haber tocado tierra, provocó fuertes lluvias en Carolina del Norte y dejó sin energía eléctrica a 450 mil residentes.
Tras su paso por la Playa de Wrightsville, el siniestro derribó árboles y parte del suministro eléctrico de la localidad. A su vez, provocó severas inundaciones en las avenidas del estado.
Las autoridades estadounidenses advirtieron que la situación podría agravarse debido a la lentitud con la que avanza el huracán, pese a que a su debilitamiento al tocar tierra.
Los Servicios de Emergencia del Condado de Craven informaron que hay carreteras intransitables debido a las inundaciones, cables de tendido eléctrico caídos y árboles derribados sobre automóviles.
El gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, informó que no hay informes inmediatos de heridos o personas muertas, pero advirtió que las inundaciones y el aumento de las aguas podrían afectar a las comunidades de baja altitud durante días.
“This storm is going to continue its violent grind across our state for days. Be alert. To those in the storm path, if you can hear me – please stay sheltered in place. Do NOT go out into this storm.” – Gov. Cooper. pic.twitter.com/YEWgyCIJit
— Governor Roy Cooper (@NC_Governor) 14 de septiembre de 2018
Por su parte, la Cónsul General de México en Raleigh, Remedios Gómez Arnau, recordó que está a disposición de los connacionales que viven en Carolina del Norte y en Carolina del Sur el número telefónico 18554636 395 del Centro de Información y Asistencia a Mexicanos (CIAM) para orientarlos durante el paso del huracán Florence.